Pronto nos daremos cuenta que en este juego no se hace lo que se quiere sino lo que se puede.
Y tendremos que comprar las calles que nos convengan (lo más largas posible) en cualquier ciudad del mundo.
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En el mapa veremos quienes son los dueños de las calles que nos gustaria tener (haciendo doble click sobre la calle).
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Descubrimos que el hijo de puta que tiene esa calle tiene bastante dinero invertido, pero le sirve de poco.
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Tiene un EDIFICIO AMENAZANTE que le jode 8.837.000 dolares diarios de alquiler.
Si encontramos una calle que nos gusta y no tiene ningun EDIFICIO AMENAZANTE, haremos click sobre su nombre y luego a AÑADIR COMO AMIGO.
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Si nos tocase una tarjeta que nos permitiese DEMOLER UN EDIFICIO o CONSTRUIR UN EDIFICIO AMENAZANTE nos acordariamos de este "amigo".
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Esto demuestra, bien a las claras, porque "nadie es profeta en su tierra" y como los que siempre te joden son "tus queridos compatriotas" ya que las reglas del juego nos llevan a esto (la realidad virtual se parece mucho a la otra).
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